Era de noche. O no, no lo sé, pero supongo que lo era. Aunque, al final, he comprobado que da igual si es noche o día, porque nada cambia (solo que pierdo un poco de visión -de día, por supuesto-). Así que:
Era de día. Uno de esos magníficos días en los que el Sol brilla y apenas hay nubes en el cielo. Casi sientes que falta de humedad, pero aún así es agradable. Se podría decir que es verano (pese a que nunca lo es). Y te das cuenta de a lo que te enfrentas: él, ella, eso...
Siempre ha estado ahí, pero apenas lo has visto. Solo en momentos "importantes has sido consciente de ello". Y menos mal. Menos mal que solo habrás tenido tres momentos importantes en tu vida, porque si hubieras tenido más ya te habrías vuelto loco.
Y odias esos momentos, sí, los odias. Al principio creías que serían etapas buenas, que todo marcharía bien, que quizás aprenderías a "ver de otra manera". Pero, como siempre, las expectaciones no concordaron con la realidad. Nada de lo que supusiste que verías llegó siquiera a mostrarse en el horizonte. Y jode. Claro que jode, porque esas cosas dejan de "ser" y pasan a "arder" dentro de ti.
Did you cause it?
Como escuché una vez:
Alguien que dice la verdad no necesita empezar una frase con 'Lo cierto es que...'
Así que... Lo cierto es que no lo sabes. Y te preguntas por 'la sociedad', 'los padres', o puede que incluso siempre estuviera dentro de ti, desde que naciste. Lo que menos importa ahora es quién/qué o por qué. Lo que importa es el cómo salir de aquí. O quizás no, y lo que importe sea acostumbrarse a ello.